Da a tu compañer@

animal y a ti mism@

la oportunidad de

mejorar su relación: le

escucharás y

descubrirás que, como

nosotros, tiene

pensamientos, opiniones,

sentimientos, emociones y decisiones

importantes que podrás tomar en cuenta

Como sus raíces griegas lo indican, telepatía, significa sentir a distancia y cuando la usamos para comunicarnos con un animal, la experiencia que el comunicador vive es “sentir” distintas dimensiones - física y emocional- de su interlocutor para recibir un mensaje integral. Parece algo mágico, sin embargo, se equipara a lo que comúnmente hacemos cuando platicamos con otro ser humano: no sólo escuchamos su voz, sino que estamos capacitados para percibir e interpretar variaciones en su forma y tono al hablar, expresiones en su rostro, sus movimientos corporales, su postura, su selección de palabras… y con la suma de todas estas variables, recibimos un mensaje de muchos planos y rico en muchos sentidos. Al hacer una comunicación con animales pasa algo similar: hay una transferencia de sonidos, emociones, imágenes mentales y sensaciones físicas que se conjugan para permitirnos la experiencia de lo que el animal nos comunica de manera directa y completa aunque nos encontremos en lugares distantes y, sorpresivamente, aun cuando él o ella hayan muerto.

Traducción simultánea

Como comunicadora, mi participación es como la de un traductor intérprete que, de la mejor y más asertiva forma posible, convierte los mensajes de los animales en frases que el humano entienda, describiéndole la multidimensionalidad de las sensaciones que percibe, y hace lo inverso para lograr la comprensión de las palabras humanas por los animales.